Energía Solar Térmica

 

 

Es el sistema de aprovechamiento de la energía solar de mayor rendimiento, siendo por tanto el más extendido.

Resulta verdaderamente eficaz en la producción de agua caliente sanitaria en viviendas, hoteles,  campings, etc.

Nuestras instalaciones de este tipo normalmente están integradas en un sistema de telegestión conectado a internet, que controla diferentes elementos como la calefacción, grupos de presión, y otros servicios del edificio, pudiendo ofrecer un mantenimiento eficaz y económico.

Un ejemplo muy claro son las instalaciones solares térmicas de las comunidades de vecinos o edificios públicos: Un simple escape del fluido calo portador (el líquido que circula por el sistema), hace que la instalación deje de funcionar, pero como siempre tenemos la energía de apoyo,  seguiremos teniendo agua caliente, haciendo que la inversión en el sistema solar no sirva de nada.

Se puede efectuar un mantenimiento preventivo a base de visitas periódicas que verifiquen el buen estado de funcionamiento, pero estas incrementan enormemente el precio del mantenimiento.

Un sistema de telegestión conectado a Internet o una línea telefónica vigilará la instalación las 24 horas sin coste adicional y avisará en el mismo momento en que se produzca una incidencia.

 

 

Además tendremos:

Sinópticos: Con indicación en tiempo real de todos los elementos y sus valores.

Gráficas: Que nos representen la evolución del funcionamiento de la instalación a lo largo del tiempo.

Registros: De todos los parámetros que deseemos por ejemplo contadores de energía.

 

 

Esquema de principio de una instalación solar térmica

 

 

 

1.- Paneles solares montados en la cubierta del edificio con orientación sur y en  cantidad de acuerdo a la energía que queramos recuperar.

2.- Depósito acumulador en el que se almacenará el agua recalentada por medio de los paneles.

3.- Elemento de apoyo para la producción de ACS con energía convencional, caldera de gas, de gasoil, termo eléctrico. Etc.

4.- Bomba circuladora que controlada por un termostato diferencial, nos transporta la energía de los paneles al acumulador mediante el fluido caloportador (agua con glicol para impedir la congelación).

5.- Punto de utilización del agua caliente.

 

Para un buen funcionamiento del sistema, es imprescindible que el circuito primario (el de los paneles) mantenga una estanqueidad perfecta y que los sistemas de medición y regulación de temperatura funcionen correctamente.

Si alguno de estos elementos deja de funcionar y no nos damos cuenta, toda la energía la entregará la fuente de apoyo convencional .

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